La interminable batalla.

Por lo general sé que la mayoría de gente pensará que siempre hay que hacer caso al corazón, yo mismo es lo que suelo opinar, ya que si no se sigue al corazón creo que es difícil conseguir la plenitud, pero el problema está cuando se sabe que siguiendo que siguiendo al corazón el camino será demasiado tormentoso.

Creo que hay ocasiones, sobre todo cuando los sentimientos son muy fuertes, en los que por mucho que diga la razón, al menos en mi caso, termino olvidando a ésta y solo hago caso a los sentimientos, incluso equivocándome en mis decisiones, y supongo que a la mayoría de gente le ocurre lo mismo.

Lo que pasa que siguiendo a la razón, quizá todo serías más fácil, nos equivocaríamos muchísimo menos, pero es demasiado difícil hacerle caso en determinadas ocasiones, ya que no somos capaces de controlar nuestra mente, nos dejamos guiar.