Somos nuestros propios jefes, si de verdad creemos en nosotros mismos, nunca dependeremos de nadie, ni nadie podrá con nosotros ¿Debemos darnos por vencido? ¿Cuál es nuestra última esperanza? ¿Quién tiene la última palabra?
Nunca hay que dar nada por perdido, porque no sabemos qué puede pasar en el último momento. Por mucho que nos quieran hacer sentir inútiles, humillarnos, reirse de nosotros ... en general, siempre que nos quieran hacer algún mal, vamos a tener la última palabra. Nuestra última palabra siempre va a ser elegir como tomarnos esas situaciones. Viendo de quién vienen esas palabras negativas y por qué razón vienen, es decir, analizando bien la situación, vamos a elegir entre, aceptar esa crítica, o pasar de ella. Por mucho que la gente se empeñe en hundirte, tu siempre te tendrás a ti mismo, y si crees en ti mismo, no necesitas a nadie más. Tenemos algo que nos caracteriza, ese algo es la libertad interior, y consiste en decidir cómo tomarse la cosas. Por muy oprimidos que nos sintamos, siempre tendremos esa libertad, que será la mejor respuesta. Siempre se ha dicho que quien ríe último rie mejor. Si nos aceptamos a nosotros mismos, sabemos cómo somos y por qué, no tendremos que dejar que hagan con nosotros lo que quieran, nunca podrán hacernos pensar de una forma u otra.
Esto nos debe hacer darnos cuenta de que somos dueños de nosotros mismos, y nadie más, que en los peores momentos, por muy injusto que parezca, casi siempre vamos a tener que afrontarlos solos, pero no necesitaremos a nadie más. Nosotros seremos los que decidamos, siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario